Alertas
Mientras que militares y policías hondureños asesinaban a más de 40 personas durante las protestas en contra de las elecciones robadas el 27 de noviembre de 2017, Aura Minerals y MINOSA (la empresa subsidiaria de ésta en Honduras) han desenterrado al menos 89 cadáveres, empleando actos de coerción y pagando a familias que viven en la pobreza por el “derecho” de trasladar a sus muertos.
Desde el pasado veintiséis de noviembre, los hondureños que claman respeto a la institucionalidad del país y el esclarecimiento del denunciado fraude electoral que mantiene en el poder a Juan Orlando Hernández, han sido duramente reprimidos por la Policía Militar, el ejército y la Policía Nacional, que a la fecha ya han protagonizado la muerte de más de treinta personas, cientos de heridos, miles de intoxicados con gases lacrimógenos y con daños psicológicos.
La gravedad de las amenazas vertidas por Jose ángel Herrera quien es el Director del Régimen Departamental del Ministerio del Interior, enciende las alarmas de las ONGs, las cuales suplen la incapacidad gubernamental de impulsar iniciativas reales de desarrollo en las poblaciones más relegadas del país, o bien, realiza las tareas de defensa.
«La ley para regular los contenidos en Internet que el Congreso Nacional (de Honduras) busca aprobar, argumentando la discriminación y el odio, es un proyecto poco claro, ambiguo, que atenta contra la libertad de expresión – Una solución desproporcionada y gravísima para la libertad de expresión – ¿Se va aplicar selectivamente solo a unas redes con nombre y apellido? ¿Se va aplicar a todo el Internet? Esto generaría una distorsión para el funcionamiento de Internet en Honduras.»